Mi familia vive en un castillo de cristal. Llevan
allí cierto tiempo. Me escriben a veces. Les va
bien. Mi hermano ha crecido mucho. Mi padre
se sube a una escalera y baja a la noche, le sigue
gustando comer arroz. El castillo está en lo alto
de una colina. Hay un valle blanco a sus pies. Vue-
lan pájaros alrededor del castillo, pájaros omino-
sos, muy negros. Si uno de ellos se posa sobre las
almenas, mi madre le limpia el polvo con un plumero.
El pájaro la observa en silencio. Mi madre le dice
cosas bonitas: -hola pájaro.
En el valle no hay un sólo hueso de héroes que ha-
yan intentado llegar al castillo. Todos los que han
intentado llegar han llegado. Los que no resistieron
el castillo murieron en él o lo abandonaron. A veces
mi madre encuentra un hueso en la despensa. Acaso
es un hueso de héroe. En el guiso de su caldero de
oro echa ese alimento de sustancia fácil de describir.
En el lento viaje de mi madre un héroe se podría es-
tremecer.