Hace unos minutos
la vela se ha apagado
pero su luz inolvidable sigue

en el silencio,
en la vida,
en los que ven

en las palabras despectivas
de los que no creen,
en la respiración de los niños
y de los que son como niños,
Geny, en tu corazón bondadoso,
en muchos sitios
que no esperábamos

No hay oscuridad,
hay esta luz en paz,
latiendo, latiendo,
en el aire,
en cada rincón,
elevándolo,
dentro de nosotros,
amándonos,
guiándonos,
esta luz
que no necesita llama
para brillar